¿Te preocupa el impacto que está teniendo el turismo en la naturaleza y en el patrimonio cultural de algunos lugares turísticamente masificados?
Es normal. Vivimos en un planeta maravilloso y que merece la pena ser visitado, explorado y conocido, pero por desgracia, el turismo masivo está echando a perder algunos de los destinos más atractivos del planeta.
Por este motivo, hoy queremos hablar de turismo sostenible y de ideas para colaborar con esta causa.
📌 Vivimos en un mundo que merece la pena explorar… pero sobre todo cuidar
Esto son solo algunos ejemplos del rastro del ser humano. Erosión, hacinamiento hotelero, contaminación de las reservas naturales o desplazamiento de la población local ante la llegada de visitantes, son también las consecuencias de un fenómeno que mueve millones de euros y de personas. Una industria que no para de crecer, a la vez que el impacto negativo sobre el medio natural.
Si vas a dejar huella, que sea de tus buenas prácticas
Como viajeros con ansias de explorar el mundo, también debemos ser responsables de la huella que dejamos y de la importancia de preservar el medio en que vivimos, respetar las culturas que visitamos y contribuir a generar riqueza dentro del país.
La definición de Turismo Sostenible según la Organización Mundial del Turismo (OMT) es: “El turismo que tiene plenamente en cuenta las repercusiones actuales y futuras, económicas, sociales y medioambientales para satisfacer las necesidades de los visitantes, de la industria, del entorno y de las comunidades anfitrionas”.
📌 El mundo está lleno de belleza. Cuídala.
Los beneficios del turismo sostenible se dividen en beneficios medioambientales, culturales, sociales y económicos. Puede ser difícil controlar todos estos elementos, pero lo más importante es que todo esto empieza en tí mismo. Bienestar también es respetar y contribuir a crear un mundo en el que merezca la pena vivir. Por tanto, solamente con pensar un poco en cómo puedes adaptar tu comportamiento al lugar al que viajes, ya estás haciendo algo.
A no ser que vayas a un parque temático, ningún otro destino lo es. En todos los lugares vive gente, con su propia realidad, su vida y su historia en ese lugar. Estás visitando su casa y te están acogiendo, por lo que conviene respetarla y cuidarla como si fuera la tuya propia. Olvídate de exigir que en todas las ciudades puedas disfrutar de los mismos lujos de los que disfrutas en tu casa y valora la diversidad y la autenticidad. Ahí está la auténtica aventura.
📌 Algunos consejos para practicar turismo sostenible
Apuntarse al turismo sostenible es mucho más fácil de lo que piensas, y más que renuncias supone realizar una inmersión casi completa en tu lugar de destino. En primer lugar, elige tu medio de transporte con cabeza, tanto si viajas en avión, en tren o en coche, intenta tomar la decisión teniendo en cuenta cuál es la mejor opción teniendo en cuenta tus posibilidades y las del lugar que te acoge.
Prioriza los alojamientos sostenibles y responsables con el medio ambiente, que cuiden el enclave, usen energías alternativas, etc. Mejor negocios locales para dinamizar la economía local.
📌 Fomenta la economía local
En cuanto al respeto al medioambiente, procura comportarte igual que en casa, es decir no derroches energía ni tampoco agua, ten cuidado con la cantidad de basura que generas y respeta la fauna y la flora del lugar. Esto incluye no arrancar flores o llevarse animales (parece increíble, ¡pero hay gente que lo hace!) y respetar las temporadas de veda de algunos alimentos, como por ejemplo de los mariscos.
Esto nos lleva a otro punto importante: apoya la economía local. Compra productos elaborados en el país, consume frutas y verduras de temporada y de proximidad. Sumérgete en la cultura del país, y aunque puedas ir a comer a una franquicia que conoces bien comida que conoces bien, mejor visita un bar o restaurante local y prueba las delicias que han preparado. No conoces bien un país hasta que no has visitado su mercado para ver como tratan a los vivos (y dicen también su cementerio, para ver cómo tratan a los muertos).
Por último, intenta mezclarte con la gente, sin imponer tus costumbres o tus hábitos de vida. Abre bien los ojos y los oídos, así aprenderás mucho más que admirando la arquitectura del Taj Majal. Las mejores playas, los más impresionantes monumentos están fotografiados por doquier, pero la comunidad que vive allí y que ha crecido rodeada de una cultura diferente a la tuya, solamente la encontrarás en su casa.
Prepara tus vacaciones teniendo en cuenta esto. El mundo será un lugar mejor si lo cuidamos y lo respetamos, si alimentamos la diversidad y aprendemos de aquello que no conocemos. Para el camino a Bienestar, elige el turismo responsable.